¿Conoces todas estas obras de Gaudí además de la Sagrada Familia? En toda guía de lugares que visitar en Barcelona, es fácil ver que muchos de ellos tienen algo en común: fueron construidos por el talentoso Antoni Gaudí, un gran representante del modernismo que dejó una huella importante en Barcelona.
Su obra maestra es, sin duda alguna, la Sagrada Familia, probablemente el monumento más representativo de Barcelona. Pero reducir su obra simplemente a esos tres o cuatro monumentos que siempre aparecen en toda guía de Barcelona es no hacerle justicia a este gran artista, ya que hay mucho más por ver. Por esta razón, si eres un apasionado de la arquitectura o de Gaudí, o quieres descubrir a fondo Barcelona a través de las obras de su arquitecto más famoso, ¡entonces te reto a visitar el mayor número posible de estos monumentos!
Antes de empezar, me gustaría agradecer a Visit Barcelona, la Oficina de Turismo de Barcelona, por darme acceso a todos estos monumentos para conocer mejor la obra de Gaudí. Ahora, veamos cuáles son las 10 obras de Gaudí que tienes que visitar.
1. Casa Vicens
De todas las obras de Gaudí, Casa Vicens suele considerarse su primera obra maestra. ¡Este dato y los elementos espectaculares que muestra hacen que la ubique primera en esta lista! La casa fue construida por un joven Gaudí utilizando ladrillos, con la parte superior de un color rojo intenso, decorada de forma preciosa utilizando azulejos. Dentro de la casa hay un jardín muy bonito, que se puede admirar durante la visita a la casa. El estilo refleja su inspiración en el arte de Oriente y Medio Oriente, y recuerda el estilo mudéjar empleado por los moros en el sur de España.
Esta gema de Gaudí, un poco escondida en las pequeñas calles del barrio de Gracia, fue construida entre los años 1883 y 1885 como residencia veraniega de la familia Vicens, una familia adinerada de Barcelona que era dueña de una fábrica de cerámicas. Fue uno de los primeros edificios modernistas de Barcelona y, aún hoy, es uno de los más hermosos. Casa Vicens ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y se ha abierto al público recién en 2015, después de haber estado deshabitada durante ¡130 años!
Dirección: Carrer de les Carolines, 20
Horario de apertura: Todos los días de 10:00 a 19:00
Precio: La entrada general cuesta 16€. Haz clic aquí para comprar tus entradas.
2. Park Güell
Ninguna lista de obras de Gaudí puede dejar fuera al Park Güell, una maravilla de parque público que el arquitecto ha dejado como legado a la ciudad. Sin embargo, no se suponía que el Park Güell fuese un parque público: fue un encargo de Eusebi Güell, un poderoso hombre de negocios, el cual quiso construir aquí el primer barrio residencial privado de Barcelona.
Las obras se llevaron a cabo entre el año 1900 y 1914, cuando tuvieron que detenerse a causa de la Primera Guerra Mundial. Desde un punto de vista puramente económico, el proyecto fue un fracaso: la clase alta barcelonesa no quiso comprar ni una casa, ya que preferían construir sus palacios en la zona del Eixample, que estaba muy de moda en aquel entonces.
El parque presenta una gran variedad de detalles en sus jardines y elementos arquitectónicos, los cuales reflejan la fase naturalista de Gaudí. El arquitecto se encontraba en el apogeo de su carrera, un periodo en el cual se inspiró en formas naturales y aplicó soluciones únicas que luego emplearía para construir la Sagrada Familia.
La parte más bonita y fotografiada del parque es, sin duda, el banco ondulante que ofrece unas vistas espectaculares de la ciudad. Este banco, junto con la entrada al parque, se destaca por el impresionante trabajo de trencadís empleado por Gaudí. El trencadís fue una técnica muy popular durante el modernismo, que usó piezas rotas de azulejos para decorar y aportar color. Lleno de simbolismo político y religioso, el Park Güell es una verdadera obra de arte.
Dirección: Carrer Olot, 7
Horario de apertura: De 08:30 a 17:30 durante la temporada baja, y de 07:20 a 20:30 en temporada alta.
Precio: Las entradas a la parte monumental del parque cuestan 10€. Haz clic aquí para reservar tus entradas.
3. La Pedrera (Casa Milà)
Oficialmente llamada Casa Milà, este edificio fue encargado a Gaudí por la familia Milà para que fuera su residencia personal, así como también edificio de apartamentos para alquilar. La familia vivió en la planta principal y alquiló el resto de apartamentos durante muchos años… De hecho, aún hay un apartamento que sigue siendo alquilado. ¿La afortunada inquilina? Una señora mayor, ¡que incluso ha escrito un libro sobre su experiencia!
El término “La Pedrera” se convirtió rápidamente en el sobrenombre de este curioso edificio, debido a su parecido con una cantera de piedra. De hecho, esta obra de Gaudí no fue muy popular en sus inicios, siendo objeto de críticas y burlas sobre sus formas y sus originales elementos arquitectónicos. Ya desde el principio, Gaudí tuvo que luchar para que el ayuntamiento aprobase sus planes de construcción, amenazándolos con colgar un cartel que dijera “Este pedazo de columna se ha cortado siguiendo las órdenes del ayuntamiento”. El arquitecto incluso se enfrentó a muchos problemas y batallas legales con la familia Milà.
Hoy en día, nadie pone en duda que la Casa Milà sea una de las obras de Gaudí más impresionantes y bien logradas. Sus formas y curvas maravillan a cualquiera, y el gris del exterior te invita a explorar el curioso mundo que se esconde en el interior del edificio. La terraza de Casa Milà, con unas chimeneas muy originales, vale definitivamente la visita.
Dirección: Passeig de Gràcia, 92
Horario de apertura: Todos los días de 09:00 a 18:30 en temporada baja, y de 09:00 a 20:30 en temporada alta.
Visitas nocturnas: de 19:00 a 21:00 en temporada baja y de 21:00 a 23:00 en temporada alta.
Precio: La entrada general cuesta 24€. Si no reservas por internet, se te aplica un cargo extra de 3€. Reserva online y ahorra: haz clic aquí.
4. Casa Batlló
Cuando hablamos de las más importantes obras de Gaudí, una que nos viene en mente fácilmente es la Casa Batlló. Se trata de uno de los edificios más originales y llamativos de la ciudad, el cual es imposible pasar por alto cuando pasas caminando. El edificio fue construido entre 1904 y 1906 para Josep Batlló, un rico hombre de negocios del sector textil.
Casa Batlló está llena de formas, colores y símbolos que son evidentes en su fachada. El edificio representa un mundo onírico, lleno de naturaleza y fantasía, inspirado en el mar. Sus elementos representan formas naturales como plantas y huesos, así como también máscaras que hacen de balcones. La fachada está cubierta por miles de trozos de vidrio y cerámica de colores, siguiendo la técnica del trencadís que Gaudí empleó en muchas de sus obras. Otro aspecto impresionante es el techo ondulante, que evoca la figura de un dragón. Si tuviera que elegir una palabra para describir esta obra de Gaudí, sería sin duda “mágica”.
Dirección: Passeig de Gràcia, 43
Horario de apertura: todos los días de 09:00 a 20:00.
Precio: la entrada general cuesta 25€. Haz clic aquí para comprar tus entradas.
5. Palau Güell
Tanto turistas como locales suelen pasar por alto esta obra de Gaudí, sin conocer que Palau Güell fue uno de los primeros proyectos importantes de un joven Gaudí. Fue construido entre 1886 y 1890 para Eusebi Güell, para quien Gaudí continuaría construyendo grandes proyectos.
El edificio se encuentra a pocos pasos de la Rambla y refleja la fase oriental de Gaudí, quien se inspiró en los estilos de Oriente y Medio Oriente, en los estilos mudéjar e islámico. Gaudí diseñó este proyecto como una adaptación del edificio existente a las necesidades de la familia Güell, teniendo en cuenta tanto su vida privada como la social. El resultado fue un edificio que se considera una de las bases del movimiento modernista y el comienzo de una relación muy fructífera con Eusebi Güell. Se trata de una visita obligada para todos aquellos interesados en entender la evolución de la obra de Gaudí.
Dirección: Carrer Nou de la Rambla, 3-5
Horario de apertura: De martes a domingo, de 10:00 a 17:30 en temporada baja y de 10:00 a 20:00 en temporada alta.
Precio: La entrada general cuesta 12€. Haz clic aquí para más información y para reservar tus entradas.
6. Colonia Güell y Cripta de Gaudí
Ubicada en las afueras de Barcelona, se trata de otro proyecto encargado a Gaudí por Eusebi Güell. ¡No hay duda de que la relación entre el arquitecto y este hombre de negocios dio lugar a algunas de las gemas modernistas más bonitas de la ciudad!
La Colonia Güell cuenta con diferentes edificios proyectados no solo por Gaudí, sino también por otros arquitectos de la época como Francesc Berenguer y Joan Rubió. Lo fascinante de este lugar es que se trata de un ejemplo excelente del modernismo aplicado a la arquitectura tanto civil como industrial.
La Colonia Güell se proyectó como un barrio destinado a los trabajadores de la fábrica del señor Güell, entre 1890 y 1918. Eusebi Güell aspiraba a proporcionar a sus trabajadores con mejoras sociales y soluciones para su calidad de vida. Por este motivo, la Colonia Güell incorpora elementos culturales y religiosos, así como también un hospital y un colegio. La iglesia de Colonia Güell refleja muchos elementos precursores a aquellos que el arquitecto utilizaría más adelante en la Sagrada Familia. Desafortunadamente, solo la cripta de la iglesia llegó a construirse y el proyecto fue abandonado tras la muerte de Eusebi Güell.
Dirección: Carrer Claudi Güell, 6, Santa Coloma de Cervelló
Horario de apertura: De lunes a viernes de 10:00 a 17:00. Sábados, domingos y festivos de 10:00 a 15:00.
Precio: La entrada general cuesta 8,50€. Haz clic aquí para comprar tus entradas.
7. Casa Calvet
Entre todas las obras de Gaudí, Casa Calvet fue el primer proyecto del arquitecto en el distrito del Eixample, el cual se estaba expandiendo rápidamente en aquel entonces. Las familias adineradas de la ciudad construían en aquel entonces cientos de casas en esta nueva zona de la ciudad, para vivir y para invertir. Se trata de otro gran ejemplo de la fase naturalista de Gaudí, en la cual utilizaba formas inspiradas en la naturaleza y formas orgánicas, dejando el racionalismo en un segundo lugar. Aún así, muchos describen Casa Calvet como la obra menos extravagante de Gaudí.
El edificio fue construido por Gaudí para un hombre de negocios que también tenía una fábrica textil (se trataba de un negocio muy popular en aquel entonces). El edificio se destinó a diferentes propósitos: el sótano y la planta baja para la tienda de la familia, la planta principal era la lujosa vivienda de los Calvet, y las plantas restantes contaban con apartamentos de alquiler. A pesar de que es una obra mucho más conservadora que el resto, cuenta con algunos elementos fascinantes como la decoración de la tribuna principal, con muchas formas naturales y simbolismo, así como también la puerta principal. ¡Gaudí no se ha ahorrado ningún detalle en esta obra de arte!
Dirección: Carrer Casp, 48
Lamentablemente, el edificio no está abierto al público. Sin embargo, puedes visitar el restaurante Casa Calvet, ubicado en la planta baja, o admirar el edificio desde fuera.
8. Torre Bellesguard
Lejos de las multitudes de turistas se encuentra la Tore Bellesguard, al pie de la sierra de Collserola. En cuanto la ves te das cuenta inmediatamente de que no se trata de la típica construcción de Gaudí: pertenece a su fase neogótica y, por lo tanto, no cuenta con tantas formas naturales y extravagantes como sus otras obras.
La Torre Bellesguard se construyó entre 1900 y 1909, inspirándose en la arquitectura medieval gótica pero con la intención de mejorarla. El terreno pertenecía a un antiguo castillo, parte del cual fue preservado e incorporado en la nueva construcción. El edificio revela la intención de Gaudí, como era el caso en muchos de sus proyectos, de fusionarlo con el paisaje que lo rodea, utilizando materiales presentes naturalmente en la zona. En este caso, se empleó piedra local. ¿El resultado? Una preciosa reconstrucción de un edificio antiguo, una mezcla de arquitectura neogótica con toques de modernismo… ¡y una de las obras de Gaudí más “escondidas”!
Dirección: Carrer de Bellesguard, 20
Horario de apertura: de 10:00 a 15:00, de martes a domingo. Último ingreso a las 14:30. Las visitas guiadas están disponibles sólo los fines de semana.
Precio: la entrada general cuesta 9€. Los fines de semana hay visitas guiadas por 16€. Haz clic aquí para comprar tus entradas.
9. Portal Miralles
Este original portal, encargado a Gaudí como entrada a la Casa Miralles, también se encuentra lejos de las rutas turísticas y, por ello, es poco conocido. La pared tiene forma ondulante y cuenta con partes hechas con trencadís blanco. ¡Sin duda, en cuanto lo ves te das cuenta de que se trata de una obra de Gaudí! La puerta cuenta con un pequeño techo, que ofrece resguardo de la lluvia, y una cruz de hierro, típica en las obras de Gaudí.
No es más que un portal, pero si te da curiosidad alejarte de las rutas más turísticas y descubrir una obra de Gaudí que muy pocos conocen, ¡te recomiendo que lo visites!
Dirección: Passeig de Manuel Girona, 55-57
10. Colegio Teresiano de Barcelona
Por último, pero no menos importante, si quieres tachar de tu lista todas las obras de Gaudí entonces hay otra gema que debes visitar. El Colegio Teresiano de Barcelona fue construido como colegio religioso, ¡y aún funciona como tal! Por esta razón, no es posible entrar al edificio; pero vale la pena igualmente admirarlo desde fuera. Es también una caminata muy bonita, en la cual te alejarás del ajetreado centro de Barcelona para explorar la zona residencial de Sant Gervasi.
El Colegio Teresiano fue construido con ladrillos rojos en lugar de piedra para ahorrar en costes, y fue terminado en 1889. Pertenece al periodo neogótico de Gaudí, lejos del estilo modernista de sus obras más conocidas. Es, sin embargo, un colegio impresionantemente grande y hermoso, que no muchos conocen.
Dirección: Carrer de Ganduxer, 85
Lamentablemente no está abierto al público, y gran parte del edificio está cubierto por u muro. Sin embargo, es posible visitarlo una vez al año durante el evento 48H Open House Barcelona, en ocasión del cual muchas gemas arquitectónicas de la ciudad están abiertas al público. Normalmente tiene lugar a finales de octubre.
Y un extra…
¿Sabías que aquí también encontrarás una obra de Gaudí escondida?
Si prestas atención, ¡también podrás ver una obra de Gaudí escondida en el Barrio Gótico! En concreto, se encuentra en una de las plazas más famosas de la ciudad, Plaza Real.
Se trata de dos lámparas coloridas que se encuentran a ambos lados de la fuente central, y fueron uno de los primeros trabajos de Gaudí. Definitivamente son bastante originales comparadas con las clásicas lámparas que se encuentran en la plaza, y representan el casco de Mercurio con dos serpientes. Así que ya sabes: la próxima vez que pongas pie en esta concurrida plaza, mira alrededor: Gaudí (y su legado) se pueden apreciar en muchísimos rincones de Barcelona!
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